Más allá del último aliento: aparece nuevo estudio de la experiencia cercana a la muerte
El estudio AWARE-II de la revista cientifica Resuscitation desmitifica la conciencia y las percepciones vividas durante y después de los episodios de paro cardíaco.
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La muerte, un enigma tan antiguo como la humanidad misma, se encuentra en el epicentro de un estudio reciente que arroja luz sobre los misteriosos recuerdos y percepciones experimentados durante episodios de paro cardíaco.
El estudio AWARE-II, una colaboración internacional de investigadores de la NYU Grossman School of Medicine y 25 hospitales prominentes, ofrece revelaciones inesperadas, desafiando las nociones convencionales sobre la conciencia en los umbrales de la muerte.
Hallazgos asombrosos
En medio de la quietud clínica que sigue a un paro cardíaco, los pacientes articulan relatos de percepciones sensoriales amplificadas, experiencias extracorporales y recuerdos vívidos.
A pesar de la creencia médica de un cerebro inactivo, el 39% de los supervivientes reportaron niveles de conciencia variados, con un 9% compartiendo experiencias trascendentales.
Se examinó las experiencias de 567 pacientes que sufrieron un paro cardíaco en el hospital. Aunque menos del 10% se recuperó lo suficiente para ser dado de alta, 4 de cada 10 supervivientes recordaron algún grado de conciencia durante el RCP, experiencias que no fueron capturadas por medidas estándar.
Publicado en la revista Resuscitation, el estudio mostró que casi el 40% de estos pacientes experimentaron una actividad cerebral que volvía a la normalidad, o casi normal, incluso una hora después de iniciar el RCP.
Los electroencefalogramas (EEG) registraron picos en ondas gamma, delta, theta, alfa y beta asociadas con la función mental superior.
Relatos de reanimación
Algunas de las percepciones reportadas en el informe incluyen:
Percepción de separación del cuerpo: "Ya no estaba en mi cuerpo. Flotaba sin peso ni fisicalidad. Estaba por encima de mi cuerpo y directamente debajo del techo de la sala de terapia intensiva. Observé la escena que estaba teniendo lugar debajo de mí..."
Percepción de dirigirse hacia un destino: "Recuerdo entrar en un túnel. Los sentimientos que experimenté eran mucho más intensos que [los habituales]. El primer sentimiento fue un sentimiento de paz intensa. Era tan tranquilo y sereno con una increíble cantidad de tranquilidad. Todas mis preocupaciones, pensamientos, miedos y opiniones se habían ido. La intensidad de la tranquilidad era tan increíble y abrumadora que no había miedo en lo que estaba experimentando. No tenía miedo de a dónde iba y qué esperar cuando llegara allí. Luego sentí calor... Luego estaba el deseo de estar en casa"
Percepciones auditivas y visuales: "Recuerdo ver a mi papá" y "Podía ver lo que estaba pasando [...] Me paré junto a la cama, fue muy extraño".
Percepciones de un ser de luz: "Recuerdo que un ser de luz [...] estaba cerca de mí. Se cernía sobre mí como una gran torre de fuerza, pero solo irradiaba calidez y amor".
Conclusiones sorprendentes
Los supervivientes han informado tener una mayor conciencia y experiencias lúcidas poderosas, incluyendo la percepción de la separación del cuerpo, observando eventos sin dolor o angustia, y una evaluación significativa de sus acciones y relaciones. Estas no son similares a alucinaciones, delirios, ilusiones o sueños, ni a la conciencia inducida por el RCP.
El equipo de investigación, liderado por el Dr. Sam Parnia, hipotetiza que el cerebro "aplanado" durante la muerte elimina sistemas inhibidores naturales, permitiendo el acceso a "nuevas dimensiones de la realidad" y la posibilidad de recordar todas las memorias almacenadas desde la infancia hasta la muerte, evaluadas desde una perspectiva moral.
Aunque se creía que el cerebro sufría daños permanentes aproximadamente 10 minutos después de que el corazón dejara de suministrarle oxígeno, el estudio AWARE-II muestra signos de recuperación eléctrica cerebral durante el RCP prolongado. Esto ofrece una nueva perspectiva sobre las experiencias cercanas a la muerte, sugiriendo que podrían ser elementos universales y compartidos.
Estos hallazgos podrían no solo proporcionar una visión más profunda de la conciencia humana en la muerte, sino también guiar el diseño de nuevos métodos para reiniciar el corazón, prevenir lesiones cerebrales y tener implicaciones para la trasplantación.