Filtran llamadas que delataron a sospechosos del triple homicidio de carabineros en Cañete: "Van a pillarte de una"
Además de ello, resultó clave el testimonio de un familiar de los presuntos autores.
Llamadas telefónicas y testimonios clave han llevado a la detención de Felipe y Yeferson Antihuen Santi, y su amigo Nicolás Rivas Paillao. Acusados del triple homicidio de carabineros en Cañete, los sospechosos fueron capturados, mientras que Tomás Antihuen sigue prófugo.
Según informó Radio Bío-Bío, Rivas suministró armas a los Antihuen para planificar el ataque. Aprovecharon la visita de los carabineros a su tío para emboscarlos. El testimonio del tío, cuya identidad es reservada, fue crucial para enfocar la investigación.
Quién es Tomás Antihuen, el último sospechoso del triple homicidio de carabineros en Cañete que sigue prófugo
El joven de 22 años cuenta con antecedentes por incendio y atentado contra la autoridad.
¿Qué dijo el tío?
El tío de los Antihuen declaró que el ataque fue planificado durante 3 meses. Tomás y Felipe, según él, lo abordaron varias veces para coordinar detalles. El tío era fiscalizado regularmente por la patrulla debido a que estaba sujeto a medidas cautelares.
Según afirmó, le manifestaron que "querían hacer algo" cuando Carabineros fueran a tomar firma, por lo que preguntaron detalles como horarios, número de oficiales, entre otras.
4 semanas antes del ataque, al rechazar la invitación de Tomás para "hacerle algo a Carabineros", el tío fue amenazado con una escopeta Baikal, arma que coincide con la encontrada en la escena.
La noche del ataque, los carabineros fueron recibidos con disparos. El tío intentó refugiarse mientras escuchaba gritos: "Éntrate, mierda". Felipe Anithuen le envió un mensaje al día siguiente preguntando si estaba bien, lo que generó más sospechas.
Video de carabineros "arrodillados, llorando y suplicando" fue clave en investigación de triple asesinato en Cañete
La existencia del metraje fue revelada por un testigo clave durante un traslado a la comisaría.
"Van a pillarte de una"
Una llama filtrada de Tomás con la madre de su hija mostró su preocupación por ser capturado, diciendo que no podía ir a los lugares que frecuentaba.
"¡Pero no voy a ir a hueviar pa allá! ¡Ponte vía oh! ¿Qué hueá te pasa?", señaló Tomás
Luego, el mismo le comentó sus intenciones de llevarse a su hija a otro lugar, se sospecha que a la capital.
"¡Ajá! Y te vai a Santiago y ahí van a pillarte de una", respondió ella.
Poco antes de ese intercambio, Tomás ya había mostrado su peligrosidad al declarar sus intenciones de matar a un cercano. En la conversación, él acusó una demanda en su contra por parte de la madre de su hija.
"Y ahora me llegaste y me demandaste, dijiste que yo te quería matarte a ti", dijo Tomás
"Pero si tú me querís matarme po", respondió la mujer.
"Quería matarte a tu papá y a ese culiao con el que andabai", sostuvo finalmente.
"Voy a sacar la hueá"
Otro testigo relató que vio a Tomás recoger una escopeta en casa de Rivas el día del ataque. Rivas y su padre, Belisario, discutieron cómo ocultar el arma después del crimen en una llamada.
"¿Cómo está la cosa pa pasar pa la casa? —preguntó Nicolás en uno de los intercambios fechado el 8 de junio", preguntó Nicolás
"Acá no ha pasado nada, todavía al momento. (…) Yo voy a sacar la hueá de acá (…) Porque pueden andar con detector de metales, alguna hueá, y queda la cagá", respondió su padre.
En otra conversación, Nicolás Rivas discutió con su padre sobre ocultar pruebas.
"Y las otras cuestiones, ¿las sacaste de ahí?"
"No, está ahí, las tapé con más basura y cuestiones, ni se nota la hueá"
"Ah, ya. ¿Y cómo está la cosa pa allá?"
"No se ha visto niuna hueá pa acá, ha estado piola todo"
"¿No te han hueviao más?"
"No, no"
"Ah, ya. Menos mal"